Una alimentación saludable no tiene por qué ser demasiado costosa.
Uno de los obstáculos más comunes para lograr una alimentación saludable es que es muy costosa. Es hora de acabar con este mito. Los componentes principales de una dieta saludable, como frutas, verduras, frijoles, legumbres y carbohidratos almidonados, son relativamente baratos y, si compra productos de temporada, planifica las comidas y hace las listas para comprar su comida, realmente puede ayudar a controlar los costos de una dieta equilibrada y variada.
Estos son algunos consejos para ayudarlo a comenzar: