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Vida saludable, planeta saludable
Las dietas son el principal vínculo entre nuestra salud y nuestro impacto ambiental. En pocas palabras, una dieta poco saludable es mala para nuestro cuerpo y también para el medio ambiente.
Las dietas y estilos de vida poco saludables son uno de los factores de riesgo más altos de muerte prematura y enfermedades. En zonas con una rápida urbanización y un aumento de los ingresos disponibles, las dietas poco saludables han ocasionado un aumento en las tasas de sobrepeso, obesidad y de las enfermedades relacionadas con la alimentación (como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer). Sin embargo, algunos cambios sencillos pueden tener un gran impacto.
La adopción de dietas más saludables y sostenibles podría evitar alrededor de 11,6 millones de muertes al año y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 25 %.
Una dieta rica en alimentos basados en plantas con menos alimentos de origen animal aporta beneficios tanto para la salud como para el medio ambiente.
La comida y nuestro planeta: un problema global
La cantidad de alimentos que producimos cada año en todo el mundo se ha mantenido en un nivel similar al del rápido crecimiento de la población mundial, que se prevé que será casi de 10 mil millones para 2050. A pesar de ello, más de 820 millones de personas no tienen acceso a suficiente comida y un número aún mayor tiene dietas de baja calidad y demasiadas calorías.
Mientras se siguen debatiendo los sistemas globales de producción de comida y su impacto en el medio ambiente, existen medidas sencillas que puede adoptar para mejorar su salud y ayudar a nuestro planeta.
Cambiar nuestra dieta para que sea principalmente a base de plantas con pequeñas cantidades de carne, pescado, huevos y lácteos es la mejor manera de lograr un equilibrio saludable y sostenible.
Una dieta saludable y balanceada es mejor para usted y para el planeta. No hay un solo alimento o bebida que proporcione todos los beneficios y nutrientes que nuestro cuerpo necesita, y por eso los alimentos por separado no son buenos o malos: la clave está en cómo los combinamos en una dieta balanceada.
Entonces, ¿qué puede hacer?
- Consuma más plantas: esto no significa volverse vegano, sino disfrutar de más variedades de alimentos de origen vegetal mientras se incluyen alimentos de origen animal en porciones más pequeñas o con menos frecuencia. Estos son pasos sencillos para consumir más plantas.
- Desperdicie menos:ya sea que trate de reutilizar las sobras, congelar comida o comprar con una lista, estos sencillos pasos pueden reducir el desperdicio de comida en el hogar o en el trabajo.
- Cambie a proteínas vegetales: intente añadir más fuentes de proteínas vegetales a su dieta diaria, ya sean cereales, semillas, frijoles, arvejas, lentejas o frutos secos.. Hay una gran cantidad de proteínas para escoger, que también son ricas en otros nutrientes esenciales, como vitaminas, minerales y fibra, y liberan la energía de forma lenta.
- Manténgase hidratado: utilice una taza, botella o vaso reutilizable y manténgase hidratado durante todo el día. El agua es una gran elección, pero los tés suaves, los cafés, las bebidas de frutas diluidas y los refrescos dietéticos pueden contribuir.
- Dese un gusto ocasional:una dieta saludable y más sostenible no significa que hay comidas prohibidas. Puede darse un gusto, solo trate de que sean porciones más pequeñas.
Las dietas poco saludables representan ahora un mayor riesgo para nuestra salud que el consumo combinado de alcohol, drogas y tabaco.
¿Qué es una dieta saludable y más sostenible?
Analicemos en más detalle una dieta saludable y más sostenible…
Referencias
- Willett, W. Rockstrome, J. (2019) EAT Lancet Commission Summary Report. Healthy Diets From Sustainable Food Systems. Disponible en www.thelancet.com/commissions/EAT.
- The British Dietetics Association (2018) One Blue Dot. Eating Patterns for Health and Environmental Sustainability: A Reference Guide for Dietitians. Disponible en www.bda.uk.com
- Global Burden of Disease Collaborative Network. The Global Burden of Disease Study (2015) Obesity and Overweight Prevalence 1980-2015. Seattle, Estados Unidos: Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME), 2017>